Todo lo que le contaría y no le contaría a mi Psicoanalista

marzo 11, 2010

El lenguaje de mi hija (1)

Este puede que parezca un post bastante personal y a primera vista ñoño, porque tienes que tener un hijo, y a ser posible que sea el tuyo o ser una enamorada de los niños, para poder disfrutar de un post tan vanal como puede ser el de el vocabulario de una niña de 21 meses.

La idea se me ocurrió ayer cuando no paraba de decir algo parecido a CHI CHIII, CHII, así que deje que me mostrara qué era y al ver que se refería a la leche pensé lo complicado y fascinante que debe ser el mecanismo del lenguaje. Viéndola y escuchándola como cada día aprende un nuevo matíz, parece un milagro ver como poco a poco va uniendo sonidos y formando pequeñas palabras. Y entonces me doy cuenta de que yo también habré pasado ese proceso y habré vivido algo así, y ahí esta otra de las muchas cosas fascinantes de tener un hijo: Te ayudan a conocerte más a ti, al ser humano en general, sus funciones y su proceso de aprendizaje.

Si hay algo que añoro en la vida es el no tener más recuerdos de mi infancia. Todavía no se conoce exactamente cuales son los mecanismos que impiden que una persona tenga recuerdos de sus primeros dos años de vida (una verdadera lástima para aquellos que hayan tenido una infancia feliz, de esas en las que los papás se les cae la baba con cualquier nuevo gesto, logro o sonido que emita su hijo). Eso ocurre a todos los seres, pero en mi caso además, no sé que procedimientos tendrá mi memoria para que practicamente toda mi infancia, que debió ser una de las etapas más felices de mi vida, este casi en blanco. Así que cuando encuentro una foto de esa época, o me reencuentro con algún amigo de entonces y me cuenta historias de mi o de nosotros, entonces me siento que he recuperado una parte de mi vida.

Por eso también escribo esto, porque ¿Qué te parecería que ahora tu madre te contara punto por punto cosas tan cotidianas como cuales fueron tus primeras palabras, como comenzaste andar, como eras con un añito y como se fue forjando tu personalidad entonces? A mi me parecería increíble. Como tengo escasa confianza en mi memoria, casi sé con total seguridad que si no lo dejo por escrito, cuando mi hija tenga 15 o 20 años, no podré recordar practicamente nada de los sonidos que ponía a sus primeras palabras. Por eso lo escribo, para que algún día mi hija pueda rescatar una pequeña parte de esa infancia perdida.

Con 21 meses exactos este es el maravilloso mundo linguítico de mi hija

- Papá (la primera palabra que pronunció), Mamá y Bebe. Estas son las tres palabras más usadas por ella, de manera que su mundo está lleno de estos tres tipos de personas, aunque últimamente a los niños de más de 4 años, más o menos, les llama nenes. Así toda mujer es una mamá, todo hombré un papá y todos los niños: nenes o bebes.

- Caca, Gua-guau, Tete, son otras palabras imprescindibles en su vocabulario. Estas, junto con las primeras, son un sonido duplicado: es el primer nivel del lenguaje.

- Monosílabos como: No, Sí, Más, Sol, Bús

-Comida: Agua y Pan son dos palabras que aprendió en seguida, me imagino que por instinto de supervivencia. En los últimos meses también ha aprendido a decir Eko (cereales solubles) y Miel dos productos que le fascinan. Al chocolate le llama Miau, porque empecé a hacerle una adicta al azucar con unas pequeñas lenguas de Gato.

- ACA: Coche ( pero ¿de qué parte del cerebro le habrá llegado este sonido para llamarlo así?) y ACACA (carrito de coche: dicese del artilugio que más ha aprovechado desde que nació: un carrito de bebé en miniatura conducido por ella misma). CACAI: dicese de cualquier daño, caída, herida, golpe, etc... Ha habido cientos de CACAIS en la corta vida de mi niña

- Elvis: Es como llama a la música, pues al poco de nacer, me hice fanática del Sr. Presley y no paraba de escucharlo, así que ahora a toda la música la llama Elvis y si suena más extridente de lo normal entonces la llama KISS esto es por su padre)

- CUACUACUA : Así le llama al dinero, y es que desde que empezó a andar, de vez en cuando le dabamos unas moneditas para que metiese en una hucha en forma de un gran pato negro, de tal forma que ahora cuando quiere dinero dice CUACUACUA.

-Personajes: Kitty, Coco (Pocoyo), EL NENE ( Mickey Mouse) o PAPANEL (Papá Noel)

- Nombres de personas: Desde hace un par de meses ya sabe como se llama NANA ( de Adriana) y mi nombre es como un leve silvido (SHIA)

- Lo último en su vocabulario son palabras como Aquí, Allí, Mío que son ni más ni menos expresiones que utiliza para "dar ordenes". También de vez en cuando dice unas parrafadas totalmente incomprensibles, pero que estoy segura que para ella tienen mucha lógica.


Hay algunas más, pero con estas por hoy es suficiente. El título del post es "lenguaje de mi hija 1" porque ahora solo acaba de empezar y seguro que en un futuro tendré que volver a escribir sobre este tema, cuando dentro de nada pueda unir palabras con palabras y contarme cosas, y aunque casi sin lenguaje la comprendo practicamente todo por su enorme expresividad, no puedo imaginar el placer cuando me pregunte y me cuente cosas de su pequeño y maravilloso mundo. Mientras tanto seguiré disfrutando de esta etapa fantástica que ya nunca volverá.

8 comentarios:

Mary Shepperd dijo...

Genial, Silvia.
Espero impaciente los siguientes progresos de la enana.
Para mí, los "mononos", eran caramelos... (sí, extraños mecanismos los del lenguaje..)
Ahora su memoria eres tú, asi que, sigue escribiendo...pienso además que todo lo que se escribe no se olvida, o al menos cuesta más tiempo. Y a los demás nos haces pasar muy buenos ratos, asi que, también egoístamente, espero que continúes haciéndolo.
María.

Paco Pérez dijo...

Me parece alucinante el estudio que estás haciendo del vocabulario de tu hija. Yo soy de esos de los que "a quien Dois no le da hijos, el diablo de la sobrinos", y mi amor, María, de 5 añitos, ha sido siempre candidata a ser analizada, tiene unas salidas....:) Me ha encantado esta primera parte, esperaré ansioso a la siguiente.

Silvia dijo...

Tienes toda la razón, ahora yo soy su memoria y si no lo escribo quedará en el olvido, y la verdad sería una pena...

Mil gracias María, con lectoras como tu es un placer escribir:)Ojalá te sigan gustando. !!

Silvia dijo...

Gracias Paco, prometo escribir esa segunda parte:)

Isa dijo...

me ha encantado, Silvia. Es una iniciativa maravillosa... yo apenas me acuerdo de lo que pasaba por mi cabeza de tan pequeña y mucho menos de lo que decía... aunque sí de que ceceaba mucho.

besos mil, izabé

Chelo dijo...

qué buena idea! y qué completo el repertorio de palabras de tu peque (una monada, por cierto)

yo tampoco tengo demasiados recuerdos de cuando era prqueña, pero claro, tengo una memoria de pez bastante acusada, así que a veces no me acuerdo ni de lo que comí el día anterior...

Beso!

Silvia dijo...

Isa, empieza ya a escribir tus experiencias de ese nuevo estado en el que te encuentras, te aseguro que pasado el tiempo, también se te olvida... es tan frágil la memoria y tan distorsionadora, que escribirlo es la mejor manera de no olvidarlo...

Y Chelo no te preocupes que a mi me ocurre lo mismo, no me preguntes que hice con detalles la semana pasada por que ya ni me acuerdo !!

Miss_M dijo...

Hola!
Bueno, no me conoces de nada, pero estaba comentando por Manhattan (en el blog, jjaa) y al final he acabado leyendo links varios. Y tenía que decirte que me ha encantado esta entrada, porque no tengo hijos pero sí trato mucho con niños, y con mi ahijada, y es lo que dices, ves la evolución del ser humano ahí, delante tuya.
Un saludito desde Cádiz, que no manhattan :D

Bela

PD: por cierto, tu niña es una muñequita por dios.

PPD: Ahora que pienso, yo creo que llamaba "nenines" a los calcetines y "nenina" a las cucharas, ajaj. Y los cuadritos, tipo pata de gallo o simplemente cuadritos, eran "pelitá". A saber, jajaja. :D